Hotel Sardonyx Ueno

Nos quedamos 6 noches en el hotel, y está cerca del parque de Ueno. La ubicación es buena, aunque en las noches no tiene tan buena pinta. Las alfombras de los pisos parecen un poco viejas, y no cuenta con elevador de servicio, por lo que algunas veces el elevador tarda mucho. La habitación fue cómoda, y las amenidades fueron buenas. El desayuno aunque pequeño es rico. Aunque está cerca de una calle transitada, no tuvimos ningún problema con el ruido.

Lo bueno: Como todos los hoteles de cadenas conocidas en Japón un completísimo equipamiento de las habitaciones que compensan lo ajustadas de tamaño que son Perfecta situación para la última noche en Tokyo a 5 minutos de la estación del Skyliner al aeropuerto Lo malo: Como todos los hoteles en Japón la tardía hora de checkin

El hotel está al lado de la estación de Ueno, muy bien comunicado para hacer excursiones cerca de Tokio, para moverte por la ciudad o para ir al aeropuerto. La habitaciones son pequeñas pero para el rato que estás en la habitación suficiente. El baño tiene todo lo que necesitas y muy buenos jabones. El desayuno, aunque es sencillo para lo que estamos acostumbrados en Europa, viene muy bien para salir del hotel ya desayunados. Incluye zumo, café y a luego eliges entre tostadas, perrito caliente, bagels,...siempre acompañado de sopa. Además te incluye un día una bebida gratis. Con lo que pasamos una tarde que estábamos por la zona a disfrutarla. El personal muy amable y correcto. Y de precio muy bien también.

Lo mejor, la zona sin duda, cercano a la parada de Okachimachi, con conexión con la Yamanote y la linea al aeropuerto. Las habitaciones, aunque pequeñas, tenían todos los servicios que puedes imaginar. El hotel también tiene lavandería con monedas y zona de bebidas. El desayuno incluido es una ventaja. El staff correcto y amable, con buen conocimiento del inglés (que se agradece!) Por otro lado, como negativo, el tamaño de las habitaciones, aunque ya estabamos avisados y no fue una sorpresa, pero aun así se hace incomodo de moverse, y más si se está durante muchos días en el hotel. El desayuno no era de muy buena calidad, ni mucha variedad, pero era útil para llevar algo en el estómago antes de salir a descubir la ciudad.

Muy buena ubicación, cuartos pequeños pero completos. El único problema es el desayuno, muy chico el restaurante y tienes que ir temprano ya que tienen un numero limitado de desayuno por cada opción..